Si la semana pasada hablábamos de la información que de forma obligatoria, clara y sencilla debe contener una página web, hoy comentaremos algunos aspectos que, en determinados casos y dependiendo del tipo de web del que seamos titulares, sería recomendable que se incorporaran, nos referimos a lo que podríamos llamar las condiciones de uso.
Estas reglas o condiciones de uso, se podrían llegar a entender como un acuerdo entre partes, es decir entre usuario y titular de la web, advirtiendo al primero de los usos permitidos respecto de la información, contenidos y servicios que ponemos a su disposición en la web.
A modo de ejemplo, indicamos el posible contenido de las condiciones de uso:
1. Condiciones de acceso, dependiendo del tipo de web o plataforma (blog, foro etcétera) del que seamos titulares, se podrían incluir estipulaciones del tipo:
a. No utilizar la web para la realización de actividades contrarias a la ley, a la moral, al orden público.
b. No manipular o alterar cualquier contenido de la web sin el consentimiento expreso y por escrito de su titular.
c. No reproducir, copiar, distribuir, comunicar públicamente, transformar o modificar los contenidos, eludir o manipular el Copyright y demás datos identificativos de los derechos del titular de la web.
2. Responsabilidades ante caídas de los servicios, mal funcionamiento de la web o virus. Está claro que no somos inmunes a todo lo que se mueve en la red, por ello no estaría de más avisar a nuestros usuarios web de que por ejemplo:
a. No podemos garantizar la disponibilidad o continuidad de la web por siempre jamás.
b. No nos podemos hacer, en todo caso, responsable de cualesquiera daños o defectos técnicos, incluidos virus u otros elementos lesivos derivados del uso de la información y de las materias contenidas en la web.
3. Propiedad Intelectual e Industrial del titular de la web, o en su caso de terceros. En la mayoría de los casos incorporaremos contenido propio, pero en otros casos podemos llegar a incorporar contenido de terceros ajenos, por ello incluir una advertencia al respecto en nuestra web, puede conllevar más beneficio que perjuicio.
4. Legislación aplicable y jurisdicción. “Ignorantia juris non excusat”, a este respecto recordad a los internautas cual es la legislación aplicable ante posibles controversias, debería ser siempre bien recibido.
2. Páginas con Comercio Electrónico
Art. 10.1 f) LSSI – “Cuando el servicio de la sociedad de la información haga referencia a precios, se facilitará información clara y exacta sobre el precio del producto o servicio, indicando si incluye o no los impuestos aplicables y, en su caso, sobre los gastos de envío”.
En un próximo artículo hablaremos de cómo deben ser las Condiciones Generales de la Contratación en un página web con comercio electrónico.